Para que una empresa defina con objetividad sus ventajas competitivas es fundamental realizar un buen análisis de su cadena de valor.
¿Qué es una cadena de valor?
Una cadena de valor es un concepto que describe la cadena completa de actividades de una empresa en la creación de un producto o servicio, desde la recepción inicial de materiales hasta su entrega al mercado.
Se trata, por tanto, de una herramienta de análisis estratégico para las empresas. El objetivo final de una cadena de valor es crear una ventaja competitiva.
El concepto de cadena de valor más conocido es el desarrollador por Porter en 1985, según la cual se pueden diferenciar dos tipos de actividades dentro de la cadena de valor de una empresa: las primarias y las secundarias o de apoyo.
Actividades primarias de la cadena de valor: Las actividades primarias tienen un efecto inmediato en la producción, el mantenimiento, las ventas y el soporte de los productos o servicios prestados. Son las siguientes:
- Logística interna o de entrada: Son los procesos implicados en la recepción, almacenamiento y distribución interna de los materiales o partes de un producto o servicio.
- Producción: Son todas las actividades que convierten los materiales y diseños en productos mínimos viables o productos acabados.
- Logística externa o de salida: Actividades relacionadas con la entrega de productos y servicios al cliente.
- Marketing y ventas: Son los procesos que tienen que ver con la colocación de productos en el mercado, cuyo objetivo es captar clientes que generen ingresos con sus ventas.
- Servicio: actividades posteriores a la venta del producto y que tienen por objeto mantener o aumentar el valor del producto o servicio.
Actividades de apoyo a la cadena de valor: son aquellas complementarias de las actividades primarias y constituyen la base de cualquier organización.
- Infraestructura: Acciones que permiten a la empresa mantener su funcionamiento cotidiano. La gestión administrativa, financiera, de planificación o de comunicación son ejemplos de actividades que generan este tipo de valor.
- Gestión de recursos humanos: Se ocupa de todas las actividades relacionadas con los empleados de la empresa, como la contratación, la formación, la remuneración y la retención del talento humano.
- Desarrollo tecnológico: Acciones relacionadas con la innovación, desarrollo de productos y servicios de la organización, tanto interna como externamente.
- Adquisiciones. Aprovisionamiento y compras: Consiste en todos los procesos de apoyo relacionados con las compras para crear productos que generen valor y destaquen en el mercado.
A partir de este análisis, la empresa deberá decidir cuál será su estrategia de diferenciación, aquella que le permitirá definir y mejorar su ventaja competitiva:
- La empresa con una estrategia de diferenciación intentará ofrecer un producto mejor que sus competidores.
- Si la estrategia es a través de la ventaja de costos, intentará realizar actividades internas a costos más bajos que los que harían los competidores.
- Si la estrategia es el enfoque sectorial, deberá potenciar las actividades que mejor satisfagan las exigencias de dicho mercado.